Mentoring
Necesaria es la experiencia para saber cualquier cosa
-Seneca –
Una profesión que a menudo viene confundida con el coaching, es la de un Mentor. A pesar que haya técnicas, habilidades (por ejemplo, la empatía y la escucha activa) que las dos comparten, son dos cosas diferentes. Déjeme resumirle cuales son y, aún más importante, cuando es conveniente requerir de una u otra.
El coaching es un proceso de acompañamiento y de toma de consciencia, no de transferencia de conocimientos. Fomenta el autodescubrimiento, un coach sabe que su cliente tiene las habilidades, destrezas y conocimiento necesarios para poder avanzar hacia su objetivo, sea eso personal, profesional, familiar o de bienestar, para poner algunos de los ejemplos más comunes. También, ayuda al coachee a descubrir, a través de preguntas poderosas y de otras técnicas concretas, cuáles son sus áreas de mejora y como crear planes de acción para avanzar.
El mentoring es un proceso de desarrollo personal (y hasta aquí es parecido al coaching…) pero desde la experiencia confirmada y constatada del profesional que lleva a cabo el proceso. Un Mentor transmite información que él domina, a alguien que la necesita. Por eso, para dar servicios de mentoring, se necesitan competencias específicas en el área de expertise. Mientras que, durante un proceso de coaching, el Coach no necesita saber del tema que se trata (pero si necesita habilidades comunicativas para que su cliente auto descubra su camino) un Mentor necesita ser un experto en el tema a tratar. La asociación internacional de mentores establece la experiencia como por lo menos 15 años de práctica en el área.
Un Mentor guía a su Mentee (el cliente que recibe el proceso, que en castellano se conoce también como pupilo) compartiendo su experiencia en el campo y transfiriendo su conocimiento, un buen Mentor no se limita a explicar cuáles son los pasos para obtener un resultado, si no usa su experiencia para guiar a su cliente a la mejor solución, y usa incluso sus fracasos y errores como herramienta poderosa de transferencia de conocimiento.
¿Qué es mejor, el coaching o el mentoring?
Voy a devolver esta pregunta con otra pregunta, en buen estilo coaching: ¿Qué criterio usarían para escoger que medio de transporte necesitan para llegar a un destino dado?
Bueno, no hay que ser un gurú del Coaching o del Mentoring para contestar: depende de la distancia, del presupuesto, del tiempo a disposición, de cómo me sienta cómodo, de lo que mejor encaja con mi estilo de vida etc. etc. etc.
Y siguiendo la analogía del tren o de la bicicleta, depende a cuál meta necesitas conseguir: en general, un proceso de Coaching se escoge cuando la persona necesita aclarar ideas, hacer cambios en su vida, salir de una situación confusa. El mentoring sirve para adquirir competencias específicas.
Por ejemplo: si alguien quiere dejar su trabajo como asalariado para emprender, pero no sabe en qué negocio hacerlo, pues le quedaría muy bien recibir un proceso de Coaching de Innovación y Emprendimiento. Y una vez aclarado eso, necesita que alguien le comparta como armar prácticamente un negocio porque nunca lo hizo antes, seria trabajo de un Mentor guiarlo en este proceso. ¡Como ven, las dos cosas pueden fácilmente ser complementarias!
Mi área de expertise en Mentoria es el desarrollo de negocio, por lo cual le invito a que conversemos para aclarar que es lo que necesita. ¡lo espero!