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Coaching
Equipos en situaciones de estrés

Equipos en situaciones de estrés

por Francesco Nistri

“De la conducta de cada uno depende el destino de todos” – Alejandro Magno –

Se ha escrito mucho sobre el impacto que tiene el estrés en los individuos, pero no se habla mucho del impacto que tiene en los equipos de trabajo y como afecta su desempeño.  Por esto antes de entrar de lleno en el tema, me gustaría diferenciar los dos tipos de estrés que se dan en los equipos de trabajo:

  1. Estrés temporal:  se manifiesta cuando hay una fecha de entrega, o cualquier aumento en la carga de trabajo que es temporal. O bien cuando hay un cambio en los miembros del equipo, y es necesario volver a alinearlo.
  2. Estrés crónico:  este tipo es más complejo porque obedece a situaciones sostenidas que generan estrés, como, por ejemplo: mal clima organizacional, sobrecarga de trabajo sostenida, poca motivación, espacio laboral no adecuado, falta de cohesión en el equipo, conflictos dentro y fuera del equipo, apoyo insuficiente, estilo de liderazgo inadecuado, etc.

 Pero con independencia de la causa, el impacto del estrés en el equipo se puede manifestar de muchas maneras, y algunas de ellas puede que no se estén considerando como asociadas al estrés, lo que complica la resolución del impacto negativo que podría tener en el desempeño del equipo, aquí algunas de las más comunes:

  • Bajo rendimiento: ya sea porque los objetivos no se cumplen, o porque los resultados son deficientes. Este es uno de los casos en los que las organizaciones pueden obviar el estrés como la causa del bajo rendimiento, y tomar acciones que van en detrimento del bienestar, y lejos de resolver el problema lo agravan.
  • Aumento del ausentismo laboral:  debido a problemas de salud de los miembros del equipo.  Un empleado sometido a estrés laboral tiene la tendencia a enfermar más a menudo, y ausentarse.  Esto tiene un impacto directo en la carga de trabajo y los resultados del equipo en general, pues alguien más tiene que asumir la carga de trabajo para que se cumplan los objetivos en tiempo y forma.
  • Falta de motivación: esto impacta directamente la eficacia y eficiencia del trabajo.
  • Disminución de la cooperación entre los miembros del equipo: Este se da con más frecuencia cuando hay un estrés de tipo crónico y un liderazgo poco efectivo.

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE EL MANEJO DEL ESTRÉS EN EL EQUIPO?

En el ajetreado mundo de hoy, el lugar de trabajo a menudo parece una montaña rusa emocional.  Las largas horas de trabajo, las fechas límite para presentar proyectos, y el constante incremento en las demandas y cargas de trabajo hacen que las personas se sientan preocupadas, agotadas y abrumadas.  Y esto, inevitablemente, tiene un impacto negativo mayor cuando se trata de equipos de trabajo.  No es un secreto que la presión sostenida en el trabajo dificulta las relaciones entre colegas, y si a esto le agregamos un estilo de liderazgo rígido y poco efectivo tenemos la receta para el desastre.

Pero hay otro aspecto que es importante reconocer y es el hecho de que el estrés afecta a las personas de manera diferente.  Lo que es estresante para una persona, podría no serlo para otra; pero además un mismo estresor provoca conductas reactivas diferentes en cada persona.  Sin entrar a profundidad en el tema, que ameritaría un artículo aparte, esto se conoce como reacción de lucha, huida o parálisis (fight-or-flight response). Además, también hay que tomar en consideración las habilidades y experiencia, edad o discapacidad que pueda afectar el como la persona hace frente a las situaciones relacionadas a su trabajo.  Esto es particularmente importante, cuando se trata de un equipo; pues si bien las metas y objetivos son comunes, las necesidades y habilidades de cada uno de los miembros del equipo son individuales.  Ahora bien, el estrés no es una enfermedad, pero si puede llevar a problemas de salud severos, que incluyen la salud mental por lo tanto es indispensable abordarlos de manera inmediata.

En los últimos años las organizaciones están reconociendo cada vez más el estrés como un problema que tiene un impacto negativo en sus equipos de trabajo, sin embargo, no siempre toman medidas adecuadas para resolver los problemas de estrés y el impacto que estos provocan.  En mi experiencia, una de las primeras acciones que toman las organizaciones es buscar capacitación en liderazgo, habilidades blandas, team building y otro sin número de temas que, si bien es cierto están relacionados con el desarrollo de habilidades para el manejo del estrés y mejorar el entorno laboral, no son suficientes para resolver los problemas que pueda estar teniendo un equipo.  Y es aquí donde el coaching esta demostrando ser no solo muy efectivo, sino que da resultados que son sostenibles en el tiempo.

¿Cómo puede el coaching ayudar con el manejo del estrés en el equipo?

  • El coaching es un método que se enfoca específicamente en la interacción entre las personas y su trabajo dentro del equipo; por lo tanto, sirve como herramienta para implementar cambios sostenibles a largo plazo, tanto a nivel individual, como de equipo y de la organización en general.
  • El objetivo del coach es ofrecer un espacio de reflexión que permita ver con claridad los problemas y buscar soluciones que sean dirigidas a las necesidades del equipo, y que a la vez son propuestas por el equipo mismo.  Por tanto, el compromiso de implementarlas es mayor que cuando un consultor o asesor diseña una estrategia que no responde a la sinergia del equipo.  Y cuando se trata del estrés, la meta del coach es que los miembros del equipo entiendan las causas fundamentales y no solo corregir los síntomas.  Esto se hace a través de una serie de conversaciones donde el coach realiza preguntas que ayudan a cada uno de los miembros del equipo llegar a entender la situación y generar ideas que antes no fueron consideradas para resolverla.
  • Otro aporte importante del coach deriva del hecho de ser a una persona imparcial que no está conectado a la situación, con el cuál los miembros del equipo pueden hablar sobre las situaciones que les causan estrés sin temores, y esto a su vez ayuda a procesar los sentimientos en un ambiente seguro y libre de juicio.
  • Con el coaching las personas logran comprender que es lo que realmente está causando el estrés, por lo tanto, tienen la posibilidad de cambiar los hábitos y conductas que lo provocan.  El coach va a servir de guía a través de estos cambios, ofreciendo no solamente su apoyo, pero también llevando el registro de los compromisos adquiridos semana a semana y haciendo revisión constante de que se hayan cumplido.  En caso de que no se cumpliera, el trabajo se dirige a determinar el porque no funcionó y desarrollar otra estrategia para implementar. 

Es una realidad que hay muchas cosas que están fuera de nuestro control, y eso no es la excepción en un equipo de trabajo; pero trabajar con un coach ayuda al desarrollo de la resiliencia de los miembros del equipo y de la organización.  Lo que se busca no es controlar el estrés sino la reacción.  El objetivo es desarrollar mecanismos para aprender a ser capaces de hacer frente a los eventos estresantes y elaborar estrategias a la medida para mejorar el rendimiento y el bienestar del equipo; lo que se traduce en equipos más efectivos y productivos.

Y porque es mejor prevenir que lamentar, aquí les dejo…

4 TIPS PARA PREVENIR EL ESTRÉS EN SU EQUIPO DE TRABAJO

  1. Planificar:  una mala planificación hará que los problemas surjan en el peor momento. No podemos controlar cuando surgen los problemas, pero si podemos estar preparados para enfrentarlos; por eso es necesario invertir el tiempo necesario en la gestión de equipos de trabajo, lo que incluye hacer una previsión de las necesidades futuras.
  1. Monitoreo de la distribución de las cargas de trabajo: cuando el reparto de cargas de trabajo es desigual, se produce frustración, se cometen errores y aparecen los conflictos.
  1. Priorizar: no todas las actividades son importantes ni todas las tareas iguales. Establecer prioridades es esencial para transmitir la claridad en los objetivos al resto de los miembros del equipo.
  1. Fomentar el bienestar de las personas: el descanso adecuado y el cumplimiento de los horarios es vital para la salud de las personas. Animarlas a llevar una alimentación sana y equilibrada y practicar deporte les ayudará a liberar tensiones. Esto promueve que sean más productivos y se enfrenten a sus tareas con mayor motivación.

En conclusión, el estrés tiene un impacto negativo en el desempeño de los equipos de trabajo, y esto significa que aún cuando tengamos un equipo excelente no estaremos aprovechando todo su potencial.  Y como consecuencia no estaremos obteniendo los mejores resultados para la organización.