Creando la cultura del Coaching dentro de su organización

por Francesco Nistri

 “Solo hay algo más caro que formar personas y que se marchen… no formarlos y que se queden” – Henry Ford –

Tome un momento para hacerse estas dos preguntas:

¿Cree usted que tiene más potencial que su nivel de rendimiento actual?

¿Cuál es el costo de oportunidad de no estar utilizando el máximo potencial

Si usted piensa como la inmensa mayoría de los ejecutivos senior, entonces seguramente ha contestado sí a la primera pregunta, y “mucho dinero” a la segunda.

Es un hecho irrefutable que la economía mundial está cambiando y para afrontar estos cambios se requerirán nuevas habilidades, nuevos procesos, nuevas estructuras, y sobre todo nuevas maneras de pensar.  Y nadie va a tener todas las respuestas; es por esto que crear una cultura de coaching dentro de la organización será crucial para tener prosperidad en la nueva economía.

En todo este proceso los ejecutivos requieren capacitación y apoyo.  El coaching es una herramienta efectiva que ayuda a los líderes a alcanzar su potencial a la vez que se ajustan a las demandas del ambiente y expanden su nivel de impacto.

En este nuevo mundo, todos estamos en el proceso de resolver muchas cosas al mismo tiempo.  Después de todo no existe un manual de cómo recuperarse después de una pandemia global seguida de una situación mundial crítica.  Las personas vamos a necesitar ofrecer a los demás compresión y empatía, a la vez que nos apoyamos los unos a los otros para forjar el camino hacia el futuro.

Por estas razones, en alguna medida, todos debemos convertirnos en estudiantes y maestros al mismo tiempo.  Y eso es precisamente lo que la cultura del coaching ayuda a alcanzar.

¿Qué es la cultura del coaching dentro de una organización?

Para entender este concepto, es necesario que primero definamos el concepto de cultura organizacional. Edgar H. Schein (1985), la define como: “aquel conjunto de creencias que comparten los miembros de una organización sobre cuál es la mejor forma de hacer las cosas, las cuales definen la visión que la empresa tiene de sí misma y del entorno”.

En una empresa que hay una cultura de coaching todos los colaboradores son responsables no solo de su propio trabajo, pero también del éxito de toda la organización.  Esto se manifiesta de diferentes maneras según la organización; pero no se limita a contratar coaches o pedir a los empleados que tomen toda la responsabilidad.  Se trata más de un trabajo en la mentalidad que en la estructura fija de la organización.

Desarrollar una cultura de coaching, implica enfocarse que cambiar las reglas no escritas, los valores, las normas, las conductas, y las prácticas.  Para difundir una mentalidad y prácticas a lo largo de la organización de manera que las herramientas de coaching se conviertan en una parte fundamental de la identidad de la compañía.  Una cultura de coaching no solo mejora la interacción entre los colaboradores, sino que también impacta las interacciones con los clientes actuales y potenciales.

La cultura de coaching permite una transformación radical de la organización por medio del desarrollo de las habilidades conversacionales y de coaching.  Crea un clima donde las personas pueden:

• Dar y recibir feedback con técnicas que lo conviertan en realmente constructivo.
• Dar apoyo y compartir ideas en el desarrollo de nuevas formas de pensar.
• Desafiarse unos a otros con apoyo, a la vez que ponen a prueba las ideas cuando sea necesario.
• Participar en conversaciones de desarrollo que sean breves, pero de gran impacto.

Ideas para crear una cultura de coaching

El primer paso es tener una visión clara para la cultura de la organización.  No tiene que ser una visión perfecta, pero necesita ser inspiradora.  Para aclarar puede hacerse estas preguntas:

¿Cómo ayudaría la cultura de coaching a cumplir con los objetivos a corto y largo plazo?

¿Cuál sería el beneficio para los líderes y colaboradores de su organización?

¿Cómo beneficiaría a sus clientes y accionistas?

Una vez que tenga una visión de lo que ambiciona para su organización, pasemos a la acción.

• Identifique los puntos débiles dentro de la cultura actual: Antes de construir la cultura de coaching es necesario que identifique y entienda los problemas específicos que sus colaboradores están experimentando dentro de la cultura actual.  Esto le facilitará identificar los retos más urgentes que deberá abordar durante del proceso de transición.
• Comience en la cúpula: Desarrollar una cultura de coaching y sustentarla a través del tiempo requiere apoyo, compromiso y convencimiento por parte del equipo de líderes.  Vale la pena considerar dar entrenamiento y coaching uno a uno a los líderes, ya que esa experiencia les ayuda a comprender la importancia de utilizar las herramientas de coaching dentro de la organización.  A su vez, podrán propiciar los cambios que se requieren desde dentro de sus equipos.
• Propicie el desarrollo de habilidades de coaching dentro de su equipo gerencial:  El equipo de gerentes será el que se encargue de aplicar la cultura de coaching en el día a día.  Por lo tanto, invertir en la capacitación de sus gerentes ayudará a empoderarlos para que adopten el enfoque de apoyo a los demás colaboradores para que desarrollen sus propias estrategias en lugar de decirles lo que deben hacer.  Las herramientas de coaching son muy efectivas en las interacciones entre colaboradores, en las evaluaciones de desempeño, y en el desarrollo de talento.  La meta es crear un ambiente donde el coaching sea utilizado como el principal método gerencial.
• Calidad sobre cantidad, desarrollar un proceso de coaching efectivo:  Más coaching no necesariamente significa mejor coaching, tampoco el número de sesiones o la duración de un programa tienen correlación con mejores resultados.  Más bien, el coaching es más efectivo cuando es dirigido a necesidades particulares y retos de los colaboradores involucrados.  Utilice encuestas para dirigir su estrategia y priorizar las áreas que necesitan mejoras.  Identifique las oportunidades y haga un esfuerzo consciente para hacer las mejoras identificadas por sus colaboradores, después reevalúe los cambios implementados por medio de una segunda encuesta.  Es importante que el coaching se convierta en una experiencia regular con la que se identifiquen todos los colaboradores de la organización.  Incluya elementos y herramientas de coaching durante el curso del día laboral para que se conviertan parte de la cultura de la organización.  Se trata de crear técnicas y herramientas que ayuden continuamente a mejorar la interacción y desempeño de los equipos, y no de dar una capacitación que sirva de inspiración por unos cuantos días y luego se detengan los esfuerzos por mantener la cultura del coaching.
• De feedback de manera efectiva: Para dar feedback de manera efectiva a los empleados es necesario seguir reglas comprobadas:
• Haga el feeback en el momento adecuado, para que la persona pueda recordar el evento e incorporar el feedback en su aprendizaje.
• Siempre comience su feedback con algo positivo, para generar un ambiente positivo y que la persona esté más receptiva.
• Enmarque el consejo positivamente, esto hará que sea más probable que lo escuchen y lo implemente.
• Utilice ideas que sean realmente alcanzables por los empleados.

Crear una cultura de coaching toma tiempo, pero definitivamente trae beneficios en el largo plazo, propicia colaboradores mas involucrados con la organización, menos rotación de personal y mayor satisfacción en el trabajo.

A pesar de que cada organización debe utilizar un acercamiento al coaching que se ajuste a sus necesidades, metas e iniciativas, las compañías que implementan estas prácticas cosechará los frutos por muchos años.